La catedral de Saint-Étienne es uno de los monumentos más sorprendentes de la ciudad francesa de Toulouse, gran parte de su singularidad es debida a que luce una mezcla de estilos y de elementos arquitectónicos, que se magnifica en su fachada donde los elementos góticos de la misma lucen una completa y caótica asimetría, impropia del estilo que tiende normalmente a la armonía. Su única torre campanario también es dispar en su configuración y parece añadida a la portada de acceso de una forma forzada que da al visitante una impresión extraña.

Este templo dedicado a San Estebán, recibe el popular sobrenombre de la «catedral inacabada», ya que son muchos los añadidos que se hicieron a la iglesia original de estilo románico; muchas de estas ambiciosas reformas no se completaron, de tal forma que la catedral fue creciendo a los pocos, con arquitectos que intentaban solucionar problemas de diseño mientras que ampliaban el templo incorporando nuevos elementos propios de su época.

Todos estas alteraciones han hecho de la Catedral católica de Toulouse un monumento  sorprendente que no deja indiferente, porque a veces el caos y la improvisación también resulta hermoso.

Actualizado el 17 abril,2018.
Publicado por Miguel Ángel Otero Soliño